El sustantivo: palabra para nombrar

Nuestra lengua materna posee una enorme riqueza. Hoy conoceremos la importancia que, dentro de ella, tienen las palabras para nombrar todo lo que existe: personas, animales y cosas.
Cuando nombramos una gallina, no la podemos confundir con un perro; tampoco un avión es lo mismo que un auto.
Las palabras que utilizamos para darle nombre a cuanto hay a nuestro alrededor, se llaman sustantivos.

Clasifiquemos

Los sustantivos que hemos descrito se clasifican en comunes y propios. Los sustantivos comunes sirven para hablar en general de personas, lugares, cosas y animales.

Por ejemplo:

• Se nos referimos a personas: niño, ingeniero, adultos, gente, ...
• Se relacionan con animales: perro, pájaros, ballena, ...
• Si hablamos de lugares: negocio, calle, baño, hospital, ...
• Si nos referimos a cosas: revista, lápices, cama, ...

Los sustantivos propios son aquellos que sirven para nombrar específicamente a una persona, lugar o animal.
Por ejemplo:

• Personas: José, Angélica, Marcela, ...
• Lugares: Santiago, España, La Moneda, ...
• Animales: Terry, Lassie, Porky, ...

Número

Los sustantivos comunes tienen una característica referida a la cantidad de elementos que nombran: el número. Si se refieren a un elemento, decimos que tiene número singular.
Por ejemplo: alumno, zapatilla y reloj.
Cuando el sustantivo se refiere a varios elementos, su número es plural. El plural se forma agregando una s, si la palabra termina en vocal; o es, si finaliza en consonante.

Observa:

Género

Otra característica importante del sustantivo, es que puede ser masculino o femenino, es decir, que posee género.
Si al sustantivo le anteponemos la palabra el, decimos que el género es masculino.
Por ejemplo:

• el alumno
• el reloj
• el príncipe
• el río

Si al sustantivo se le antepone la palabra la, hablamos de género femenino.
Observa los siguientes ejemplos:

• la zapatilla
• la ballena
• la mañana
• la idea
   

Sigamos clasificando

Hay otras clasificaciones del sustantivo que queremos que conozcas. ¿Leamos?

Colectivos

Hay sustantivos que se refieren a un conjunto de seres, aunque siempre vayan en número singular: son los llamados sustantivos colectivos
Un ejemplo para demostrarlo es el sustantivo enjambre.
Enjambre es un conjunto de abejas. Es un sustantivo singular, pero se refiere a un conjunto de abejas, que es el sustantivo plural.

Otros sustantivos colectivos son:

• Orquesta: grupo de instrumentos.
• Bandada: conjunto de pájaros.
• Rebaño: grupo de animales (ovejas, cabras, etcétera).
• Piara: grupo de cerdos.
• Tropa: conjunto de soldados.
• Arboleda: grupo de árboles.
• Cardumen: conjunto de peces.
• Gente: grupo de personas.

Veamos estos ejemplos:

• La tropa esperaba que el capitán saludara.
• Dicen que la gente le tiene miedo a la jauría de lobos.

Concretos y abstractos

Podemos clasificar de acuerdo a cómo los percibimos en concretos y abstractos.
Los sustantivos concretos son los que percibimos mediante nuestros sentidos, es decir, que es posible ver, tocar, oler, escuchar o saborear.

Por ejemplo:

• Podemos ver: mar, nieve, niña, mamá,...
• Podemos tocar: pelota, tela, zapato,...
• Podemos oler: perfume, comida, flor,...
• Podemos escuchar: música, gritos, voz,...
• Podemos saborear: pan, helado, fruta, galletas,...

Observa:

Los animales llegaron al bosque para dormir tranquilos.

Animales y bosque son sustantivos concretos.
Los sustantivos que no se pueden percibir se llaman abstractos.
Se usan para nombrar ideas o valores que existen, pero no se ven, tocan o escuchan.

Son sustantivos abstractos:

• Amistad
• Limpieza
• Alegría
• Responsabilidad
• Amor
• Paz
• Sabiduría

Observa estos ejemplos:

• La verdad siempre triunfa.
• Se necesita la justicia para sembrar la paz.
• Verdad, justicia y paz son sustantivos abstractos.
   

El mundo de las palabras: El Sustantivo

Como ya lo dijimos, las palabras son conjuntos de sonidos -si están dichas verbalmente- o de letras -si están escritas- y significan o quieren decir algo. Sin embargo, no todas las palabras son, por decirlo así, de la misma categoría. El idioma está compuesto por muchísimas palabras, y para poder conocerlas y estudiarlas mejor, las separamos en distintos "tipos", según la función que cumplen, es decir, de acuerdo a para qué se utilizan al momento de comunicarse.

Cada tipo de palabra recibe un nombre distinto. Así, existen palabras que son sustantivos, otras que son artículos, preposiciones, pronombres, adjetivos, etcétera. Todo esto, teniendo en cuenta las características especiales de cada grupo y principalmente su función.

Categorías

El sustantivo sirve para nombrar todo aquello que nos rodea, ya sean personas, animales, cosas, ideas, fenómenos climáticos, etcétera, y ya sea que pertenezcan al mundo real o a la fantasía. Es común a todos los sustantivos poseer género - masculino o femenino- y número -singulares o plurales-.

Existen varias categorías de sustantivos, según el criterio que se utilice para dividirlos. Algunas son:

• Sustantivo común - sustantivo propio: si la palabra sirve para nombrar toda una clase de personas, animales o cosas, sin individualizar cada uno por su nombre, es un sustantivo común. Por ejemplo: corazón, casa, teléfono y ángel.
  En cambio, si la palabra se refiere al nombre individual y propio de cada realidad, entonces se llama sustantivo propio. Por ejemplo: Juan, Laura, Chile y Colo Colo.
  Existen muchas cosas que solo pueden ser nombradas por un sustantivo común, porque no tienen nombre propio. Por ejemplo: mano, cama y campana. Pero, las personas o animales que pueden ser nombrados por un sustantivo propio, pueden ser también nombradas por varios sustantivos comunes, por ejemplo: Arturo Prat (sustantivo propio) puede ser también hombre, héroe y marino (sustantivos comunes).

• Sustantivo concreto - sustantivo abstracto: si la palabra sirve para nombrar algo que se puede percibir mediante los sentidos, es decir, ver, tocar, gustar, oler u oír, se trata de un sustantivo concreto. Por ejemplo: estrella, cuaderno y aullido.
  Si, por el contrario, la palabra designa algo que no se puede percibir a través de alguno de los cinco sentidos, se trata de una sustantivo abstracto. Por ejemplo: tristeza, libertad y amor. Este tipo de palabras, generalmente refleja ideas, sentimientos, estados de ánimo, todo un mundo de realidades que existen y que podemos comprender y sentir, pero de una manera distinta a como sentimos el calor o el hambre. También, son sustantivos abstractos los días de la semana, los meses y las estaciones del año. Por ejemplo: el invierno, al que no vemos ni tocamos, aunque podemos ver la lluvia y sentir el frío que se producen durante él. Es por esto que el sustantivo invierno es abstracto.

• Sustantivo simple - sustantivo compuesto: los sustantivos que designan algo utilizando una sola palabra, se denominan sustantivos simples. Por ejemplo: ojos, sol y auto. En cambio, aquellos que están formados por dos palabras, se llaman compuestos: anteojos, quitasol y automóvil.

• Sustantivo primitivo- sustantivo derivado: las palabras sustantivos que no provienen de ningún otro sustantivo, se llaman sustantivos primitivos. En cambio, cuando la palabra que es un sustantivo proviene de otro sustantivo, se dice que deriva de él y, por lo tanto, se le llama sustantivo derivado. Por ejemplo, el sustantivo mesa no proviene de ningún otro, pero da origen -entre otros- a los sustantivos mesita, mesón y mesero. Estos tres sustantivos son derivados, ya que derivan del sustantivo mesa.

¿Qué es lápiz?

Hasta aquí, hemos revisado cuatro divisiones posibles para caracterizar a los sustantivos. Existen otras, pero las veremos en otra oportunidad. Por ahora, es importante que sepas que a cada palabra sustantivo se le pueden aplicar todas esas divisiones, una por una, y siempre deberá pertenecer a una de las dos posibilidades que se dan en cada una. Por ejemplo, aplicaremos todas las clasificaciones que vimos al sustantivo lápiz. Para esto, nos preguntaremos a qué categoría corresponde en cada caso:

-¿Común o propio? Lápiz es un sustantivo común, ya que no es el nombre particular de nadie.

-¿Concreto o abstracto? El sustantivo lápiz es sustantivo concreto, ya que se puede ver y tocar, se percibe con los sentidos.

-¿Simple o compuesto? La palabra lápiz es un sustantivo simple, ya que es una sola palabra, no está formada por dos.

-¿Primitivo o derivado? El sustantivo lápiz es primitivo, ya que no proviene de ningún otro sustantivo.

En síntesis, tenemos que la palabra lápiz es un sustantivo común, concreto, simple y primitivo. Si además queremos agregar su género y su número, lápiz es masculino y singular, respectivamente.

Este mismo análisis se puede aplicar a todos los sustantivos que existen.

Complemento del sustantivo

El segundo grupo de palabras que puede determinar al núcleo del sujeto, y más específicamente al sustantivo, es el complemento del sustantivo. Como norma general, debes saber que, en el estudio del idioma, se entiende por Complemento a un grupo de palabras que esta formado por una preposición seguida de una frase.

Por lo tanto, el complemento siempre comienza por una preposición, lo que hace muy sencilla su identificación, y permite no confundirlo con la frase sustantiva yuxtapuesta. Eso sí, para reconocer un complemento hace falta recordar las preposiciones: a - ante - bajo - con - contra - en - entre - de - desde - durante - hacia - hasta - para - por - según - sin - sobre - tras.

Son estas palabras las que siempre encabezarán un complemento, seguidas de una frase. Cuando este complemento determina a un sustantivo -en este caso, al sustantivo que hace de núcleo del sujeto-, se llamará complemento del sustantivo.

Veamos una oración en que el núcleo del sujeto está determinado por un complemento del sustantivo.

En esta oración, el sujeto es La vida, y el núcleo del sujeto es el sustantivo vida, el cual está determinado por el grupo de palabras de los deportistas, ya que es esa vida la que se afirma que es sana. Este complemento del sustantivo está encabezado por la preposición de y continúa con la frase los deportistas, la que a su vez tiene como núcleo el sustantivo a la palabra deportistas, determinada por el artículo definido los.

Nuestra exploración del idioma continúa. Hemos ido poco a poco, desarmando la arquitectura del mensaje para revelar cómo se van ensamblando sus elementos. Hoy nos adentraremos en la estructura del sustantivo, para descubrir las unidades más simples que conforman nuestro idioma, con las que vamos construyendo la comunicación, combinándolas, tal como se encajan las piezas de un rompecabezas. La invitación que te hacemos esta vez, va dirigida no sólo a tu imaginación, sino también a tu inteligencia. Sólo si estás dispuesto a aplicar al máximo tu razonamiento lógico, serás capaz de llegar con éxito a la meta. Tú decides ¿Te sientes capaz de aceptar este desafío?.

Estructura interna del sustantivo

Un mensaje se puede subdividir en unidades menores y éstas, a su vez, en otras unidades más pequeñas, y así sucesivamente.

A este ejercicio de "descomponer" un texto, es decir, examinar los elementos que lo componen, se le llama "análisis gramatical".

Fíjate en la siguiente secuencia:

- Un texto se subdivide en oraciones.
- Las oraciones están conformadas por Sujeto y Predicado.
- El Sujeto y el Predicado están conformados por Núcleo y Determinantes.
- El Núcleo y los Determinantes están constituidos por una o más palabras.

Este ejercicio de reflexión nos permite advertir que el lenguaje se va armando como las piezas de un rompecabezas. ¿Cuáles serán las piezas más pequeñas de este puzzle? ¿Serán las palabras? A simple vista pareciera que sí. Veamos...

Lee los siguientes sustantivos:

gato - gata - gatos - gatas

Si te fijas bien, te darás cuenta que al interior de la palabra sustantivo también pueden distinguirse elementos menores.

Análisis Gramatical

Las cuatro palabras anotadas tienen un elemento común: "gat". Cada una de ellas tiene, además, otros componentes. El elemento "gat", sin embargo, permanece invariable. Es el componente esencial de esta familia de palabras, el que nos indica a qué nos referimos con todos y cada uno de los sustantivos del ejemplo. Ciertamente, se trate de macho o hembra, o de uno o más ejemplares, las cuatro palabras se refieren a la especie animal "gato".

Este elemento esencial e invariable, recibe el nombre de lexema básico o fijo.

Los sustantivos sirven para nombrar personas, animales, cosas; emociones, sentimientos; virtudes, defectos. Todo aquello a lo que le damos un nombre: gato, perro, casa, río, Renato, Santiago, Chile, niño, amor, egoísmo, valor, constancia, etcétera.

Cada sustantivo se refiere a una clase de objetos, tiene un significado. Este significado está contenido en el lexema básico o fijo (L.B.) Observa los siguientes ejemplos:

Lexema básico

Morfemas de género

Los ejemplos muestran que al sustituir el lexema básico, cambia la clase de objeto al que nos referimos. Puedes advertir también, que a continuación de cada lexema alternan los elementos "o / a" para indicar la oposición macho - hembra, hombre - mujer.

Estos elementos se emplean como indicadores de género, y se denominan morfemas de género. Los "o" y "a" son los morfemas de género más comunes en nuestro idioma, aunque no son los únicos.

Todos los sustantivos tienen género, aunque el morfema de género no siempre está presente. En su ausencia, el género se determina anteponiendo un artículo (el o la):

Morfemas de número

Además del género, los sustantivos tienen número singular o plural, según se refieran a uno o más objetos de la misma clase. La oposición singular / plural se indica en nuestro idioma por la ausencia o presencia de "s" o "es", se llaman morfemas de número: