Proyecto
Salón Hogar
La
gramática teórica está dividida en cuatro áreas
principales, que son: fonología, morfología, sintaxis
y semántica.
Semántica
(del griego semantikos, “lo que tiene
significado”), estudio del significado de los signos
lingüísticos; esto es, palabras, expresiones y
oraciones.
Quienes
estudian la semántica tratan de responder a preguntas
del tipo "¿Cuál es el significado de X (la palabra)?".
Para ello
tienen que estudiar qué signos existen y cuáles son los
que poseen significación —esto es, qué significan para
los hablantes, cómo los designan (es decir, de qué forma
se refieren a ideas y cosas), y, por último, cómo los
interpretan los oyentes—.
Tenemos que
partir de una definición previa. Sabemos que todo signo
lingüístico tiene dos caras: el significante o
parte material del signo y el significado o
imagen mental que sugiere el significante.
Aun hemos de
añadir un nuevo elemento: el referente o elemento
real, existente, al que se refieren tanto significado
como significante. No es lo mismo la palabra que designa
un referente que el referente mismo.
Componentes
del significado
El significado
o imagen mental está compuesto por una serie de
rasgos conceptuales que todos los hablantes de una
lengua asocian de una manera general a un significante.
No obstante lo dicho, hay que tener en cuenta que este
significado tiene dos componentes:
Denotación.
Son los rasgos conceptuales objetivos. Es el
significado que presenta una palabra fuera de cualquier
contexto. Constituyen el núcleo semántico fundamental.
Son comunes a todos los hablantes. Es el significado que
encontraremos en el diccionario
Connotación.
Son los rasgos conceptuales subjetivos. Son las
significaciones que lleva añadidas una palabra. Estas
significaciones tienen un carácter marcadamente
subjetivo. Dependiendo de los hablantes, una misma
palabra puede tener connotaciones distintas.
La semántica
estudia las diferentes relaciones que contrae un signo
con todos los demás, pues todo el léxico constituye un
sistema, cuya estructuración facilita a los hablantes la
adquisición de ese léxico.
Vamos a ver
alguna de estas relaciones.
Relaciones
entre significantes: la homonimia
La homonimia
Decimos que dos
palabras son homónimas si su significante es
el mismo; es decir, están compuestas por los mismos
fonemas, o su realización fonética coincide. No se
trata, pues de relación entre significados.
La relación
homonímica más habitual se produce entre palabras de
distinta categoría gramatical:
Vino:
sustantivo, masculino, singular
Vino:
tercera persona del singular del pretérito indefinido,
del verbo venir
Pero también se
produce en palabras de la misma categoría. Se da
en aquellos casos en que el significado de las palabras
no tiene ninguna relación, porque proceden de étimos
distintos.
Hinojo:
"planta medicinal” (finoculum)
Hinojo:
“rodilla” (genuculum )
Dentro del
concepto general de homonimia, se pueden distinguir :
palabras
homógrafas: Tienen las mismas grafías y los mismos
sonidos
haya:
"árbol"
haya:
"primera/tercera pers. sing. presente de subj. de haber"
palabras
homófonas: Tienen los mismos sonidos, pero distinta
grafía.
Aya:
"criada"
halla:
"segunda pers. sing. Imperativo verbo hallar ".
Todas ellas
son, por supuesto, homónimas. Las dos primeras son
homógrafas. Las dos últimas son homófonas, entre sí, y
respecto a las anteriores. (Ver: Parónimos)
Relaciones
entre significado y significante: monosemia, polisemia y
sinonimia
Monosemia
Es la relación
habitual que existe entre el significado y el
significante en una palabra. A un significante se
corresponde un solo significado.
Por ejemplo, la
palabra lapicero expresa un referente que sólo
puede ser evocado mediante ese significante.
Polisemia
Una palabra es
polisémica cuando podemos expresar con ella varios
significados. O, dicho de otra forma: un significante
puede tener varios significados.
La polisemia se
distingue de la homonimia en que se trata de una
relación entre los dos planos del signo lingüístico: los
diferentes significados de una palabra tienen, o han
tenido, un origen común.
Araña:
'animal'/'lámpara'
Espada:
'instrumento'/'matador de toros.'
La polisemia es
uno de los mecanismos más eficaces de economía
lingüística, pues permite expresar varios significados
con un único significante.
Sinonimia
Dos o más
palabras son sinónimas si tienen el mismo significado.
Es decir, la sinonimia consiste en la igualdad de
significado, cuando existen diferentes significantes.
Algunos
lingüistas niegan la sinonimia, pues en realidad no
habría dos palabras con un significado totalmente
exacto. O, cuando menos, sería prácticamente imposible
encontrar palabras con el mismo significado teniendo en
cuenta todas sus acepciones y contextos en los que
podría aparecer.
Por ello, se
pueden distinguir diversas formas en que puede
presentarse la sinonimia:
Sinonimia
conceptual: Los significados denotativos son
plenamente coincidentes. Ej: listo=inteligente
Sinonimia
connotativa: Puede, en ocasiones, no haber
coincidencia denotativa; sin embargo, esto no impediría
que se consideren sinónimos por los valores connotativos
que encierran. Ej: listo=zorro
Sinonimia
contextual: En determinados contextos, se pueden
establecer ciertas sinonimias que serían impensables en
otros. Ej: listo=preparado, en contextos como ¿Estás
listo?
Relaciones
entre significados: el campo semántico
En estos casos
sólo tenemos en cuenta el significado de la palabra; nos
olvidamos del significante. Todo significado está
constituido por una serie de notas significativas que
aluden a su referente, y que pueden servir para
diferenciar unas palabras de otras: reciben el nombre de
semas. El conjunto de todos los semas de una
palabra es el significado o semema.
Evidentemente,
los sememas aluden siempre a los referentes, pero no se
identifican con ellos. Las palabras no son las cosas,
sino la forma de referirse a ellas.
Cada lengua
expresa una visión del mundo diferente, aunque el mundo
sea el mismo para todos. Ello obedece a que el
significado de las palabras no se establece de una
manera arbitraria.
Es posible
descubrir una estructuración lingüística también dentro
de los significados. De ahí nace el concepto de campo
semántico: es un conjunto de palabras que tienen
un sema común, entre las cuales se pueden establecer
diversos tipos de relaciones. Cada lengua posee su
propia forma de estructuración de sus campos semánticos.
Ciertos
factores contribuyen a esta estructuración. Los más
estudiados son los que se verán a continuación.
Hiperonimia
e hiponimia
Llamamos
hiperónimo a la palabra cuyo significado abarca al de
otras, que se conocen como hipónimos. Los hipónimos a
los que se refiere una palabra son, entre sí,
cohipónimos.
Se pueden
distinguir:
Relaciones
de inclusión: Un conjunto de palabras puede estar
englobado dentro de otra palabra que las incluya a
todas.
Hiperónimo |
Hipónimos |
|
Flor |
Clavel |
Cohipónimos |
Rosa |
Margarita |
Relaciones
lineales. En otros casos, se establecen relaciones
de sucesión. Así sucede, por ejemplo, con los nombres de
los meses o los días: Enero, Febrero,... Diciembre;
lunes, martes,..., domingo.
Hiperónimo |
Hipónimos |
|
Día |
lunes |
Cohipónimos |
martes |
miércoles |
Relaciones
de oposición: complementariedad, antonimia y
reciprocidad
Se entiende por
antonimia, en un sentido general, el hecho de que dos
palabras tengan dos significados contrarios. Sin
embargo, no siempre se trata de la misma relación. Así,
distinguimos tres tipos de oposiciones distintas.
Complementariedad. La negación de uno de los
elementos supone la afirmación del otro. Ej:
cruento/incruento.
Antonimia.
Entre los dos términos propuestos se extiende una
gradación. Ej: caliente/frío.
Reciprocidad.
Un término implica al otro. Ej: entrega/recepción
Valores
expresivos del significado
El significado
puede convertirse en un elemento de máxima efectividad
expresiva. Si tenemos en cuenta los elementos de la
comunicación, la situación comunicativa nos va aclarar
el significado de muchas palabras. Pero a veces, el
contexto referencial hará que surjan significados
nuevos, que antes no estaban presentes.
Tenemos que
tener en cuenta que toda palabra tiene un significado
denotativo y un significado connotativo. Las
connotaciones pueden ser positivas o negativas, siempre
dependiendo del hablante que las considere.
Cuando una
palabra tiene mayoritariamente connotaciones positivas,
las llamamos palabras-ronroneo; frente a las
palabras-gruñido. Democracia sería una
palabra-ronroneo; frente a dictadura, palabra-gruñido
Ahora bien, hay
palabras consideradas negativamente por todos. Se
produce, entonces, el fenómeno que se conoce como
tabú. Con esta palabra se designa lo prohibido en
una lengua polinésica, de donde se toma.
Palabras tabú
son aquellas que no pronunciamos, porque tienen una
carga connotativa despectiva. Se sustituyen por otras
palabras que designan la misma realidad, pero sin esas
connotaciones peyorativas. Es lo que conocemos como
eufemismos (del griego: palabra bien sonante).
Ciertas partes
del cuerpo siempre han estado sometidas a fenómenos de
tabú. Pocos son los alumnos que se atreverían a pedir al
profesar permiso para ir a "mear". Y en el caso de que
la hicieran se consideraría una falta de respeto. La
normal es que se utilice el eufemismo: "¿Puedo ir al
servicio?
Al igual que
existen eufemismos, también hay disfemismo.
Cuando la palabra tabú se sustituye por otra, pero de
carácter humorístico. En vez de muerto, fiambre.
Familia
semántica
Se entiende por
Familia Semántica aquel grupo de palabras unidas por una
idea o grupo de ideas, que pueden ser sinónimos,
antónimos o ideas afines. No confundir con Familia
léxica.
Ejemplo:
A continuación
te entregamos algunas palabras que corresponden a una
determinada familia semántica:
Piedras
preciosas
a) esmeralda
b) rubí
c) topacio
d) jade
e) diamante
Aves
canoras
a) zorzal
b) canario
c) jilguero
d) ruiseñor
e) calandria
f) alondra
Conjunto o grupos
a) bandada
b) piara
c) cardumen
d) enjambre
e) jauría
f) manada
Algunas
familias Semánticas:
Lee y estudia
el significado de las siguientes palabras de cada grupo.
Familia
semántica: habla
Lengua:
es el lenguaje de una nación.
Idioma:
lenguaje de una nación o país.
Dialecto: variedad regional de un idioma.
Argot:
jerga, jerigonza.
Jerga:
lenguaje especial de ciertas profesiones u oficios.
Germanía: jerga de ladrones y rufianes.
Coa:
jerga de los delincuentes chilenos.
Lunfardo: jerga de los delincuentes argentinos.
Facundia: abundancia y facilidad de palabras.
Elocuencia: arte de conmover o persuadir con
palabras.
Locuaz:
que habla mucho.
Parlanchín: que habla mucho o dice cosas
inoportunas.
Verborrea: abundancia de palabras
insustanciales.
Parco:
sobrio, moderado (incluyendo el lenguaje).
Lacónico: breve, que expresa su pensamiento con
pocas palabras.
Cuchichear: hablar en voz baja al oído.
Charlar: conversar sin objetivo determinado.
Departir: conversar con alguno sobre algo.
Platicar: hablar unos con otros.
Vagido:
llanto del recién nacido.
Diálogo: conversación entre dos o más personas.
Monólogo: soliloquio.
Soliloquio: habla de una persona no dirigida a
otra.
Galimatías: lenguaje oscuro y confuso.
Dislalia: dificultad de articular las palabras.
Barbotar: barbotear o mascullar.
Musitar:
murmurar, susurrar, hablar entre dientes.
Bisbisar: musitar, hablar entre dientes.
Mascullar: hablar entre dientes.
Balbucir o balbucear: decir vacilantemente
palabras.
Vociferar: hablar a grandes voces.
Desgañitarse: gritar o vocear esforzándose.
Vitorear: aplaudir con gritos de alabanza.
Familia
semántica: discursos y refranes
A)
Discursos:
Discurso: razonamiento de alguna extensión
dirigido por una persona a otras.
Invectiva: discurso acre y violento contra
personas o cosas.
Diatriba: discurso o escrito violento e
injurioso contra personas o cosas.
Apología: discurso oral o escrito, en defensa o
alabanza de personas o cosas.
Homilía:
plática para explicar al pueblo materias religiosas.
Ditirambo: discurso de alabanza exagerada.
Arenga:
discurso breve destinado a enardecer los ánimos.
Panegírico: discurso encomiástico (de
alabanza).
Filípica: invectiva, censura acre (áspera).
Sermón:
discurso religioso orientado a la corrección moral.
Predica:
sermón o plática.
Alocución: discurso o razonamiento breve,
dirigido por un superior.
B)
Refranes:
Paremiología: tratado o estudio de los
refranes.
Refrán:
dicho popular con enseñanza de validez general.
Adagio:
máxima, sentencia breve.
Proverbio: refrán, sentencia.
Dicho:
palabra o frase original. Grupo de palabras con que se
expresa un concepto verbal.
Sentencia: dicho conciso con una enseñanza.
Apotegma: sentencia o dicho memorable.
Aforismo: Máxima de intención moralizante.
Máxima:
pensamiento adoptado como regla de conducta.
Otros
ejemplos:
Familia
semántica: airoso
Garboso
Gallardo
Apuesto
Elegante
Esbelto
Gentil
Galán
Triunfante
Vencedor
Sus antónimos:
Desgarbado
Fracasado