L  a  G r a n  E n c i c l o p e d i a   I l u s t r a d a  d e l   P r o y e c t o  S a l ó n  H o g a r

 

Los periodos culturales indigenas


Para el antropólogo y etnólogo  José Imbelloni, el poblamiento de América es el producto de diversas oleadas migratorias, cuyo origen y orden podríamos resumir de la siguiente manera:

  1. Fuéguidos: dolicocéfalos, baja estatura, cultura elemental (balsas, industria de la piedra rudimentaria). Procedían de Tasmania. Entraron por el Estrecho de Bering. Su ubicación final fueron los bordes más extremos de América del Sur.
     

  2. Plánidos y pámpidos: dolicocéfalos, de gran estatura y origen probable pre­mongólico. De igual forma, poseen vínculos con poblaciones parecidas a los australianos. Su cultura es de cazadores nómades. Llegan vía terrestre. Se ubicaron en las grandes praderas norteamericanas y en las pampas de América del Sur. Se suponen que son sus descendientes los llamados pieles rojas o plánidos de Norte América y los llamados pampas de Argentina.
     

  3. Láguidos: baja estatura, cultura rudimentaria (recolectores y cazadores menores). Negroides similares a los melanesios. Entraron por vía terrestre. Se ubicaron finalmente en el escudo oriental de Brasil, concretamente en Lagoa Santa.
     

  4. Amazónicos: débilmente dolicocéfalos, estatura mediana. Acentuación del elemento mongoloide. Emparentados a grupos protoindonesios. Llegaron vía marítima. Se concentran en las cuencas del Amazonas y el Orinoco. Cultura vinculada a los cortadores de cabeza de Borneo. Uso de flechas y cervatanas. Conocían la agricultura. Sabían tejer y teñir, así como también confeccionaban hamacas y redes. Descendientes de ellos son los jíbaros y guaraníes.
     

  5. Andidos: eran braquicéfalos, de baja estatura. Procedían del Pacífico. Fueron introductores de una agricultura superior con utilización de sistemas de riego (cultivos intensivos, maíz). Instituciones políticas de tipo patriarcal con influencia en núcleos urbanos. Se ubicaron en México y en toda la franja de la cordillera de los Andes. De estos grupos provienen los mayas, aztecas e incas.
     

  6. Otros: los ístmicos, los cuales se ubicaron en el istmo centroamericano; los colúmbidos, asentados en el noreste de América del Norte; los esquimales, el hábitat de éstos se circunscribió a la zona circumpolar.

James Bailley, en otro intento de explicar el poblamiento americano, sostiene que se dieron tres períodos de colonización intensiva, todos los cuales cruzaron el Atlántico y transformaron la prehistoria cultural de América:

  1. los indios asiáticos, se ubicaron en las inmediaciones del Lago Titicaca, Bolivia, y su influencia se sintió no muy fuertemente en Chile y en la cuenca del Amazonas; también se instalaron en los estados sureños de Norteamérica;
     

  2. los fenicios; se les encontró no sólo en México sino en el Amazonas;
     

  3. los pueblos del mar occidentales, perfeccionaron la civilización del regadío iniciada en América más de mil años antes por el pueblo indio, por los sumerios y acadios.

Otra de las teorías sobre el origen del poblamiento es la que planteó, en su momento, Canals Frau (citadas por Sanoja Obediente y Vargas Arenas), quien sistematizó las regiones, según la procedencia, de la siguiente forma:

  1. La civilización traída del antiguo oriente: es la del origen fenicio, cananeo, cartaginés, hebreo. Sostiene, también, un probable origen en el valle del Nilo.
     

  2. Influencias del Asia meridional: señala puntos de contacto entre el arte budista de la India y del Sudoeste Asiático y algunos elementos escultóricos de origen maya.
     

  3. Influencias del Asia oriental: sostiene que por el año 500 cinco misioneros budistas chinos, "habrían descubierto el gran país de Fu­sang, 40,000 lys al Este del Celeste Imperio, distancia que corresponde a la existente entre la costa de China y la Península de California".

La tesis del viaje impulsado por corrientes marinas del noruego Tor Heyerdahl, quien, a bordo de una embarcación que denominó Kon­Tiki, logró atravesar el Pacífico, partiendo el 28 de abril de 1947 del puerto del Callao (Perú), para arribar el 7 de agosto del mismo año a un atolón de Roraia, del Archipiélago Tuamotu, en Polinesia, ratificando, de esta manera, la posibilidad de este tipo de travesía.

b. Evidencia de los primeros pobladores o descubridores.

Todo parece indicar y demostrar que el hombre descubrió el continente americano en períodos que bien pueden sobrepasar los 30,000 años y que estos primeros pobladores fueron cazadores de megafauna y lograron extinguir 31 géneros de animales, entre los cuales podemos citar: mastodontes, mamuts, bisontes de grandes cuernos, camellos, tapires, caballos, cerdos, variedades de ovejas y cabras, bueyes almizcleros, variedades de antílopes, bueyes, yaks, castores gigantes, tigres, especies de osos, lobos y coyotes.

A grosso modo, podemos elaborar el recorrido del hombre por el continente americano gracias a la arqueología y a la paleoantropología, de la siguiente manera:

  1. Según Marvin Harris, los huesos más antiguos pueden ser fragmentos de un cráneo y costillas encontrados en el sur de California, los cuales, según nuevas técnicas de fechaje (aminoácidos), revelan una antigüedad de 48,000 años. "Si se confirma este hallazgo, esto convertiría a la gente del Nuevo Mundo en contemporáneos de los últimos neandertales europeos"
     

  2. Un útil de hueso fue localizado en Canadá, específicamente en la región del Yukon, datado por carbono radioactivo 14 en unos 27,000 años.
     

  3. Yacimientos de la meseta mexicana presentan una antigüedad superior a los 20,000.
     

  4. En el noreste de Alaska aparecieron materiales líticos de una antigüedad de 16,000 años.
     

  5. En Venezuela, cerca de Taima­taima, o sea en El Jobo, se recuperó una punta de proyectil del hueso pélvico de un mastodonte joven, muerto entre 13,000 y 14,000 años.
     

  6. Puntas de flechas y lanzas, sin antecedentes europeos, conocidas como Clovis, Folsom y Sandía, con fechas hacia 11,500 antes de Cristo, se localizaron en Oklahoma, Colorado, Nuevo México y sur de Arizona.
     

  7. Por lo menos hace 10,000 años, gracias a evidencia de puntas de proyectiles del tipo clovis y folsom (puntas de piedras canaladas por ambos lados), se sabe que en Arizona los hombres consiguieron cazar mastodontes.
     

  8. En Panamá, en la región del lago Madden, se localizó una punta de flecha del tipo Clovis, con una datación de 9,000 antes de Cristo.
     

  9. Restos de huesos quemados de animales, asociados a restos humanos, con una antigüedad de 8,650 años, fueron localizados en Chile, en la gruta de Pallinaike.

Descendientes de estos primeros pobladores serían las naciones indígenas que encontraron los europeos a su llegada a este continente y las que lograron sobrevivir  hasta nuestros días.


Estado de los aborígenes americanos para el momento de la llegada de los españoles.


 

El origen del hombre americano ha sido objeto de estudio de la historia y de esta manera han surgido varias teorías que tratan de dar explicación al mismo: la teoría autoctonita que da como origen la Pampa Argentina; la monogenista asiática, que da como origen el continente Asiático y, la teoría multilateral que lo ubica en Australia, Polinesia, Mongolia y los Chales.

Estas teorías nos conducen a pensar que América no tiene un origen único sino que es una conjunción de varias oleadas migratorias dadas en diferentes épocas y de diferentes regiones.

Entre estas teorías están:

a. Teoría Autoctonita o Aislacionista de Ameghino, estudioso argentino que da como origen del hombre americano la Pampa Argentina en el período terciario, plantea que el hombre proviene de seres inferiores. Lo más refutado a su teoría es el planteamiento de que el hombre se origina en el terciario cuando está comprobado científicamente que se originó en el cuaternario.

 


Florentino Ameghino
 
b. Teoría Monogenista Asiática de Hrdlicka. Hrdlicka, antropólogo checo, plantea que el hombre americano tiene uniformidad racial y que de acuerdo a estas características fisonómicas puede ubicarse su origen en Asia, específicamente en la Mongolia; que vino de Asia, atravesando el Estrecho de Bering (puente de hielo que comunica a Mongolia con Alaska). Esta migración se produjo hace aproximadamente 10.000 años y en cuatro períodos diferentes. Se le refuta a Hrdlicka que no existe uniformidad racial en el aborigen americano, por lo tanto no tiene un origen único en la Mongolia.
 


Ales Hrdlicka

c. Teoría de Origen Múltiple de Paul Rivet. Este antropólogo francés planteó la teoría multilateral oceánica en su obra "Los Orígenes del Hombre Americano". Dado lo heterogéneo de la población americana Rivet devela la existencia de varios orígenes y varias oleadas migratorias de poblamiento. Plantea como lugares de origen: Australia, Polinesia, Mongolia y los Urales, dando como inicio de esas oleadas hace 25,000 años. Utiliza como paso hacia América el Estrecho de Bering y el Puente Antártico. De esta teoría se refuta el uso del Puente Antártico ya que su existencia no ha sido comprobada


Paul Rivet
 
 

 

Para estudiar la situación del aborigen americano en el momento de la llegada de los españoles es necesario ubicar el contexto geográfico en que éstas se desarrollaron en América. Se puede plantear que según los historiadores estaban ubicados en dos grandes regiones: la Región Andina y la Mesoamericana; sin embargo, la mayor cantidad de población estaba en el centro de ambas, en lo que puede llamarse Región Colombiana - Centroamericana.

 

La región Mesoamericana estaba ocupada por las altas culturas de México, la región Colombiana - Centroamericana, ocupa Guatemala, El Salvador, Nicaragua, Costa Rica, Panamá, Honduras, Colombia y parte de Ecuador. La Región Andina, Perú, Ecuador, Chile, parte de Bolivia y parte de Argentina.

 

En la región Mesoamericana encontramos la cultura Azteca, cultura que había alcanzado gran desarrollo.


En la región Colombiana - Centroamericana encontramos desde civilizaciones que habían alcanzado gran desarrollo como los Mayas y los Incas, y grupos culturales preagrícolas, las cuales tenían como base de subsistencia la caza, la pesca y la recolección, instrumentos de trabajo rudimentario y eran comunidades eminentemente nómadas.

 

Otros grupos culturales semisedentarios que practicaban además de la caza, la pesca y la recolección una agricultura itinerante, es decir, sembraban y al recoger la cosecha se trasladaban a otro territorio, utilizando por lo general la tala y la quema como técnica de cultivo, eran gobernados por caciques y creían en espíritus.
 

Grupos de agricultores medios que utilizaron desde la tala y la quema hasta técnicas de cultivo y conservación de alimentos más avanzados como los silos, canales de riego y terrazas, técnicas que permitieron su asentamiento definitivo en un determinado territorio como es el caso de los Chibchas en Colombia, los Caribes, Arahuacos y los Timotocuicas venezolanos.

 

Es importante plantear que el grado de desarrollo cultural en América no fue producto de un simple traspaso cultural por oleadas migratorias europeas antes del siglo XV sino fue producto de la conjunción de tres factores específicos: el aborigen autóctono americano, el aporte de migraciones u oleadas de población y las innovaciones que producen al reunirse y transformarse los elementos de ambas culturas.

 

A la llegada de los españoles existía en el continente una gran variedad de grupos culturales en todo el territorio. Toda Centroamérica, principalmente lo que hoy sería México, Guatemala y Belice, estaba poblada por grupos humanos organizados y con un desarrollo cultural interesante. De igual manera, tanto las islas del Caribe y todos los países que tienen costa en este mar, así como la zona del sur del continente, incluyendo tanto los Andes como la gran selva americana y las costas tanto de los océanos Pacífico y Atlántico estaban pobladas por diversos grupos humanos.

 


 

Arahuacos: Los indios del mar Caribe y las Antillas

 

 

Arahuaco, araguaco o arawak es el nombre genérico dado a varios pueblos indígenas que se encontraban asentados en las Antillas y la región circuncaribe a la llegada de los españoles en el siglo XV. El nombre también se ha aplicado posteriormente a numerosas etnias que hablan o hablaban lenguas de la familia arawak y que tradicionalmente habitaban una extensa zona comprendida entre la actual Florida y las Antillas, la zona costera de Sudamérica, el oeste de Perú, el sur de Brasil e incluso Bolivia y Paraguay. De hecho esta familia de lenguas es una de las más extendida de América del sur.

Incluían a los taínos, que ocupaban las Antillas Mayores y Bahamas, los nepoyas y suppoyos de Trinidad y los iñeris que habitaban las Antillas Menores antes de la llegada de los caribe, que vivían en la costa este de América del Sur, hasta lo que es actualmente Brasil. El extremo sur de la difusión arahuaca se encontró en territorios del extremo norte de Argentina a donde antes del siglo XIV había llegado la parcialidad arahuaca conocida como chané, en el siglo XX todavía había grupos arawak en el NE. de Boliva y E. de Paraguay.
 

 

Origen

En color azul claro, encontramos a los origenes arahuacos que poblaron el Caribe

 

A la llegada de los conquistadores españoles los taínos estaban sufriendo la invasión de sus territorios y la esclavización de sus mujeres y niños por parte de los caribes. Por el sur de América otras parcialidades arahuacas (arawak) como la de los chané sufrían un proceso similar a manos de etnias como la de los avá, dando lugar por forzada mixogénesis a la población llamada "chiriguana". Aunque otros grupos del interior de la Amazonia vivían relativamente libres sin estar enfrentados continuamente a sus vecinos, como sucedía con los pacíficos caquetíos de Venezuela.

En líneas generales (especialmente en las Antillas) la llegada de los españoles implicó un agravamiento de la situación para los arahuacos (tal cual lo describiera Bartolomé de las Casas), a punto tal que por las enfermedades traídas de Eurasia y las feroces condiciones de esclavización a las que fueron sometidos, la población prácticamente desapareció en algunas regiones del Caribe, aunque en otros lugares se dio un fuerte proceso de mestizaje.

La población arahuaca de las Antillas disminuyó y a finales de siglo se había extinguido. Esta catastrófica tasa de mortalidad se debió a la llegada de enfermedades europeas (a las que los arahuacos no eran inmunes), y a la desaparición de sus fuentes de alimentación, entre otras causas históricas.

Antes de la conquista española, los sistemas ecológicos de las grandes islas, con sus copiosas cosechas y abundancia de peces, junto con las poblaciones compactas y estables, favorecieron el desarrollo de una evolucionada estructura política y social. Una casta de jefes hereditarios gobernaba a otras tres castas, la más baja de las cuales estaba formada por esclavos. Los conflictos entre las castas parecen ser que eran mínimos. En esta sociedad matrilineal (en la que la sucesión se establece por línea materna). La religión presentaba una jerarquía de deidades paralela a la estructura social.

Los grupos arahuacos de Sudamérica resistieron mejor el contacto europeo debido a que sus grupos eran más pequeños y estaban más dispersos. Su estructura social también era matrilineal, pero mucho menos compleja. Los arahuacos de tierra firme comerciaban con los holandeses y los ingleses. Durante los siglos XVII y XVIII evolucionaron hacia una agricultura de plantaciones.

En el transcurso del siglo XX, los arahuacos comenzaron a aceptar trabajos asalariados para suplir los escasos beneficios de la agricultura, la caza y la pesca. Aunque su cultura actual refleja diversas influencias externas, este grupo se ha distinguido desde la época prehispánica por su destreza en la alfarería (véase Cerámica), los tejidos, la talla en madera y los metales. En la actualidad viven unos 30.000 arahuacos en Guyana y poblaciones menores en Surinam y en la Guayana Francesa. Otros grupos de habla arahuaca se hallan dispersos por diversas partes de Sudamérica.

Rivales - Sus rivales sociopolíticos dentro del mar Caribe eran los caribes, considerados agresivos, y los guanahatabeyes (o siboneyes), considerados "dóciles", posiblemente los pobladores originales de las islas. Los taínos a menudo ofrecían protección a los guanahatabeyes a cambio del trabajo manual. No se trataba de esclavitud, sino más bien una especie de impuesto en trabajo.

Primeras descripciones - Cristóbal Colón escribió que los arahuacos fueron amistosos. Les trajeron loros y pelotas de algodón y lanzas y otras cosas, que ellos cambiaron por objetos de cristal y las campanas de los halcones. "De buen grado negociaron todo lo que ellos poseyeron... ellos no llevaban armas, y no las conocen, ya que les mostré una espada, ellos la tomaron por el borde y se cortaron por la ignorancia.... Sus lanzas están hechas de madera. Con cincuenta hombres nosotros podríamos subyugarlos a todos y hacerles hacer lo que quisiéramos".

Claro, todo esto desde el punto de vista europeo. Aquí se inició una positiva relación para los españoles, relación que no duraría demasiado y sería fatal para los indígenas. Aunque el pueblo taíno de la época de la invasión española era un pueblo amistoso eso no significaba que no defendieran agresivamente sus posesiones. Por mucho tiempo se ha tomado en cuenta el lado "romántico" en muchos casos de la historia escrita por los cronistas españoles. En realidad los pueblos arahuacos del Caribe habían frenado la expansión caribe, llegando éstos hasta las Islas Vírgenes y se rebelaron contra los españoles.